A 60 días de la desaparición del Submarino Ara San Juan las novedades giran solo en torno a que ocurrirá cuando cese la ayuda Internacional. Crece la incertidumbre sobre como continuará la búsqueda. Esa misma incertidumbre la tienen los familiares de los 44 tripulantes de la nave argentina. María Rosa y Jorge Villarreal son los Padres de Fernando Villarreal, Jefe de Operaciones del Submarino desaparecido. Estuvieron en Monte Maíz visitando familiares y hablaron en Canal 2: “Seguimos con la misma incertidumbre que el primer día y eso nos causa mucha angustia y mucha tristeza. Por eso estamos tratando de elaborar lo sucedido para poder darle un cierre. Por estos días la Armada Argentina brinda contención psicológica y social a los familiares de los tripulantes. Nosotros lo estamos haciendo de manera particular con un Terapeuta que nos va guiando y nos recomienda que tomemos nosotros algunas decisiones para ir elaborando la situación”, explicó Jorge quien además es Marino retirado.

En los primeros días permanecieron en la Base Naval de Mar del Plata con la esperanza de que en algún momento apareciera el Submarino. A medida que los días fueron pasando y se iniciaba la búsqueda comenzaba a palpitarse lo peor lo que fue causando mucha angustia en los familiares. Algunos decidieron abandonar la Base para esperar noticias en sus hogares y así no descuidar las actividades habituales de cada uno aunque la incertidumbre y la impotencia dificultan cualquier tipo de obligación y/o distracción.

María Rosa, mamá de Fernando, coincide con su esposo y dice: “Es volver a empezar todos los días. Hasta el día 20 o 21 de la desaparición nosotros esperábamos en el mar porque creíamos que en cualquier momento entraba el Ara San Juan. Luego de ese tiempo comenzaron a aparecer las dudas aunque la esperanza nunca se pierde. Cada uno lo elabora como puede”, añadió.

Los familiares han creado un grupo de whatsapp en donde se mantienen en contacto permanente y lo utilizan como una forma de contenerse unos a otros. Además hay un grupo de las mismas características conformado por las madres de la tripulación.

Todos guardan la esperanza de que en algún momento aparezca el Submarino y puedan cerrar una etapa que causó desesperación en un primer momento; angustia e impotencia luego y, una vez superado un período de tiempo considerable, causó bronca en los familiares de los tripulantes. A tal punto que se convirtieron en querellantes contra la Cúpula de la Armada y tienen la esperanza y la necesidad de que, como mínimo, pierdan su rango ante la negligencia que cometieron.

Fernando Villarreal hace del año 1999 que forma parte de la Armada Argentina. Hizo toda su carrera en la escuela Naval. Allí se recibió y luego fue a dar la vuelta al mundo. Tuvo un promedio que le permitió trabajar con la Marina de Brasil y de Perú. Luego de ello hizo varios cursos y decidió ser Submarinista luego de un viaje de Instrucción. Dentro del Ara San Juan es Teniente de navío; Jefe de Operaciones. Es el encargado de distribuir todas las tareas dentro del Buque supervisado por el Comandante.

Con respecto a la información que llegó desde Estados Unidos y que indica que el submarino sufrió una implosión Jorge expresó: “La Armada nos dice que no tienen nada oficial al respecto más allá de que esto se sabe desde el mes de diciembre. Ellos argumentan que han hecho todo lo que se puede hacer y con Buques de última tecnología y no lo han podido localizar”.

En las últimas horas artículos periodísticos señalan que el Submarino se ha buscado también en lugares señalados por videntes relacionados con los familiares. Sobre eso Jorge dijo: “Sobre cuestiones metafísicas puedo decir que eso depende de la creencia de cada uno. Nosotros nos basamos en datos concretos y, estos datos, aún no arrojan indicios de nada”.

María Rosa expresó: “Nosotros no vamos a parar hasta que se sepa la verdad. Pasados los sesenta días y no tener nada concreto nos causa mucha bronca. Todo está en la causa en manos de la Jueza de Caleta Olivia. Nosotros nos hemos constituidos como querellantes porque esto sucedió porque era una navegación muy larga para el Submarino. Por algunos comentarios sabemos que la Nave no estaba preparada para afrontar esta navegación así que no vamos a parar porque los responsables de esto tienen que ir presos. Tanto el Comandante de Adiestramiento como el Comandante de la Fuerza del Submarino”.

Sobre las hipótesis de lo que pudo haber ocurrido, Jorge, como Marino retirado expresó: “Hay muchas hipótesis y todas pueden ser posibles. Los submarinistas como buenos profesionales que son están preparados para una emergencia extrema. Yo no sé muy bien que puede haber ocurrido puesto que ellos cuentan con elementos de emergencia por si tienen alguna dificultad. Pueden lanzar algunas señales a la atmósfera, por ejemplo, para que los puedan ubicar. Aparentemente ellos no pudieron accionar nada. Ellos antes de salir a navegar verifican equipo por equipo y elemento por elemento. Eso es lo que se hace en ese momento pero no se sabe lo latente. No hay que perder de vista que el Submarino estuvo en una reparación de media vida y no se puede determinar si se usaron los elementos y si se siguieron los procedimientos adecuados. Esto está en la causa pero como no se tiene ningún indicio del Submarino se empieza a investigar hacia atrás y se intenta determinar en qué condiciones estaba la Nave y de qué manera se la reparó. Reitero, se pueden analizar varias hipótesis; una de ellas es que hubo un desperfecto en las baterías; estas son muy peligrosas porque generan hidrógeno que es un gas muy peligroso. Si bien se ha dicho que en la última comunicación los tripulantes dijeron que el tema estaba subsanado esto realmente no es seguro. Las inclemencias del tiempo tampoco ayudaban porque navegar en condiciones adversas, con olas de nueve metros y viento de treinta nudos es muy difícil. Ellos estaban haciendo un snorkel para renovar el aire y las inclemencias del tiempo pueden haber hecho que ingresara agua dentro de la nave. Cuando esto ocurre hay un sistema de seguridad que hace que se cierre. Si no se pudo renovar el aire y el Submarino se fue hacia abajo sin esa renovación de oxígeno la posibilidad de una implosión no es descabellada. Una implosión hace que todo se comprima y no quede ningún indicio. Evidentemente ha sido una causa inmediata, muy cruenta y que no les permitió hacer absolutamente nada”, concluyó.