REGIONALES
7 de diciembre de 2021
FAMILIA QUEDÓ EN LA CALLE TRAS UNA DISCUSIÓN
CON LA FAMILIA DE LA MUJER
La familia Maidana necesita ayuda y que la suerte mejore. Recuperar sus pertenencias y la calma. Una discusión en el seno familiar los despojó del sueño de la casita propia y los dejó sin techo, en la calle y enemistados con los suyos.
Noemí Carballo y Pedro Maidana tienen dos hijos, dos varones de 9 y 11 años. Desde hace cinco meses venían "construyendo una pequeña vivienda" en la casa del padre de la mujer, contó, porque antes habitaban "una choza de lona" donde no podían cocinar siquiera los panes para salir a vender. Esa construcción, en su barrio El Triángulo, a la que "solo faltaba techar", contó Noemí, fue uno de los disparadores de un entredicho que habría derivado en insultos de parte de su progenitor y "amenaza de golpes", de su hermano para su pareja, Maidana.
La familia se alejó y se comunicó con Acción Social del municipio para solicitar ayuda. De ahí se dirigieron a la Comisaría de avenida Colón para asentar una exposición ante las amenazas, pero uno de los agentes que los recibió les sugirió realizar una denuncia por violencia familiar, narraron. "Esa noche la pasamos a la vera de la ruta, todos arriba del auto. Había una tormenta fea...", dijo Carballo.
Con la exposición, al otro día, la familia accedió a que la Justicia les brindara alojamiento por tres días, en el Hotel Gran Bell Ville. En la mañana de ayer debieron desalojar esa habitación y volvieron a quedar en situación de calle.
"No tienen dónde quedarse ni donde cocinar y están con sus dos hijos", comentó un vecino amigo que les brindó un techo por anoche, mientras que ayer pasaron la jornada en una carpa.
La mujer se lamentó porque no cuentan con cocina ni colchón ni muchos elementos. Tampoco mucha ropa, ya que fueron con un asesor de Justicia a retirar pertenencias de la casa de su padre, pero las amenazas y las agresiones verbales se habrían repetido, por lo que se les recomendó abandonar el lugar sin lograr su cometido.
Vale mencionar que con la denuncia, "ellos no pueden acercarse por cuatro meses", aseguró la mujer. De todas maneras, sostuvo que la madre "amenazó con quitarme los hijos si los mandaba a pedir por la calle". "Nosotros lo que hacemos es salir a vender los panes caseros y panes dulces que hace mi marido. A esta altura del año vendíamos mucho, pero ahora no hemos podido hacer nada todavía", marcó.
Los Maidana esperan poder ingresar a la casa para recuperar elementos para producir, vestirse y también desean desarmar la construcción para reutilizar materiales, aberturas y chapas, en otro terreno al que puedan acceder. Dependerá de que la Justicia garantice a ellos esa posibilidad.
La vivienda
Noemí indicó que desde "la Municipalidad habían ayudado a levantar la piecita y estaban dando solución a nuestro problema", de vivir en una choza muy precaria. Sin embargo, frente a este drama "nadie se acercó" en la jornada de ayer, afirmaron.
"Necesitamos encontrar un nuevo lugar, mientras debemos conseguir una casita para alquilar, pero no sé si podremos hacerlo sin garantías ni recibo de sueldo", apuntó la mujer. Dijo que "los niños están cansados de andar de un lado para el otro" y sabe que "la solidaridad de la gente es indispensable", necesitan los alimentos que ofrecen muchas personas y dirigentes de la ciudad, pero no tienen dónde cocinar, les urge un techo y si es propio, mejor.
FUENTE: eldiariocba.com.ar