El Capitán del Club Deportivo Argentino en la Final del ´88, Jorge “Pitín” Josa, pudo reconstruir parte de ese día y se refirió al Trinche Carlovich.

En declaraciones en ZONA DE NOTICIAS dijo: “Tuve la suerte de poder compartir cancha con el Trinche. La verdad que fueron pocos partidos pero lo disfruté mucho porque lo tenía muy cerca. Era una época en la que había muchos jugadores de afuera; estaba Rodolfo Rodríguez también (ex Instituto de Córdoba), Roberto Settecase, el Negro Díaz, Rondó y varios jugadores que, junto a los locales, formábamos un gran plantel. Al último trataron de traer al Trinche para reforzarlo y coronar un año que pintaba para ser nuestro”.

En la primer Final de ese torneo, en el mes de octubre de 1988, Argentino y Lambert igualaron 1 a 1 en el estadio Monte Maíz y siete días más tarde en un tumultuoso y anticipado final, Lambert se consagró Campeón ganando por 2 a 1 en su cancha.

Al respecto, Jorge Josa expresó: “Es muy turbio y triste esa parte del fútbol que estábamos viviendo en esa época en la Beccar Varela pero uno trata de no recordar mucho eso y dejarlo pasar. Y después de esta noticia de lo que le pasó al Trinche yo prefiero tenerlo presente como jugador que era y feliz de haber tenido la suerte de jugar con él. El hecho es muy lamentable. Es la Argentina; es Sudamérica y nosotros estamos acostumbrados a perder gente muy valiosa por este tipo de casos que tienen que ver con la delincuencia lamentablemente”.

El ex Capitán del Raya dijo que ese año la gente los acompañó mucho: “Era el año en el que teníamos que salir campeón nosotros y con el refuerzo de Carlovich –al cual no conocíamos tanto en principio pero nos habían hablado mucho de él- se quería coronar ese momento. En esos  años todo lo que se recordaba de Carlovich era el partido contra la selección Argentina cuando él jugó para el combinado de Rosario, previo al Mundial ´74. Y él apareció aquí; una persona grande, corpulenta, bien grandote de físico y fundamentalmente con una habilidad admirable. Tengo algunos recuerdos de él. Nosotros entrábamos al vestuario y él ya estaba ahí. Siempre en el mismo rinconcito y cerca de las duchas. Pero él hablaba muy poco. Era una persona muy introvertida y después del partido ya no lo veíamos más. Contacto fluido hemos tenido poco con él. Solo dentro de la cancha. Hablaba más adentro de la cancha; con la pelota fundamentalmente. Él llegaba el domingo a la casa del técnico, Miguel Ángel Bustos, dormía la siesta y llegaba a la hora del partido. Se ponía la camiseta, entraba y la rompía. Así que muchos tuvimos la suerte de compartir cancha y convivir en el fútbol con él. Y compartir una cancha con el Trinche ha sido un privilegio para todos”, concluyó.