El padre de una joven de 15 años de Justiniano Posse contó en FM La Medialuna lo que le tocó vivir cuando un sujeto le dijo groserías´a su hija y la quiso meter en una casa contra su voluntad.

La joven salió corriendo y llegó llorando a su casa y le contó lo sucedido a s padre. Éste, fuera de sí, salió de su casa y se fue derecho para la vivienda indicada y rompió la puerta buscando al agresor. Luego llegó la policía y la situación se fue descontrolando cada vez más. El padre de la joven denuncia que una oficial de policía los trató muy mal queriendo culpar de lo ocurrido a la víctima.

“Mi hija pasó por una vivienda de la calle Guemes y un sujeto le dijo “que lindas te… que tenés”; la agarró de un brazo y la quiso meter adentro.

Por suerte ella pudo zafar y salió corriendo para mi casa. En el trayecto se dio vuelta y vio que la seguía el flaco este. Nosotros estábamos festejando el cumpleaños de un primo mío cuando ella llegó llorando a casa. Le pregunté que le pasaba y me dijo: “Papi, me quisieron agarrar y me quisieron acosar”. Yo agarre la moto y le dije que me indicara en donde había sido. Cuando ella me señala el lugar yo me bajo de la moto y le empiezo a golpear la puerta. Como no atendían empiezo a golpear con mayor insistencia. Se asomó uno por la ventana y le dije que saliera el que me había querido meter a la nena ahí adentro. “Acá están todos durmiendo hace rato”, me dice. Nadie quería salir.

Yo comienzo a las patadas a la puerta para que alguien salga. Reconozco que estuve mal porque eso no debí hacerlo, y mientras yo pateaba la puerta viene doblando el patrullero de la patrulla rural. Les cuento lo sucedido, empiezan a golpear y nadie salía. Al ver que no había respuesta de nada yo comienzo a patear la puerta y la tumbo. Quiero entrar pero el policía me sacó.

Yo estaba ciego y no quería salir. En eso llega mi primo y un amigo y me sacan de ahí. El policía sigue golpeando y nadie salía. El policía llama refuerzos, vienen dos policías más que intentaron calmarme pero yo comencé a gritar y a amenazar a todos los que estaban ahí adentro. Porque quería que lo sacaran de ahí. La policía me pidió si mi nena podía reconocer al agresor y apenas lo vio lo señaló. Yo me quise meter de nuevo pero la policía me sacó y me llevó hasta la vereda del frente.

Ahí me dijeron que ellos no podían hacer nada mientras no hubiera una denuncia. El polcía le dice a mi nena que vaya a la Comisaria y haga una denuncia. Mi primo la lleva en la chata hasta mi casa para pasar a buscar a la madre para ir a hacer la denuncia. En la Comisaría la tuvieron un tiempo largo esperando y nadie le tomaba la denuncia.

A todo esto al lugar llego una policía rubia, que no conozco ni se su nombre. De mal carácter. Llegó y pregunto “¿Qué pasó acá?”, le cuento lo sucedido y me dice: “¿Cómo sabés que es cierto?”. Le digo porque mi hija llegó llorando y me contó lo que pasó. ¿Usted tiene hijas?, le pregunté; “a vos que carajo te importa”, me contestó.

 Le digo que me trate con respeto porque yo no le falté el respeto. Y me dijo que ellos no podían hacer nada. Yo le dije que mi nena se los había señalado y que como podía ser que no lo pudieran sacar de ahí. Y me dijo que lo que parecía es que yo era el delincuente porque había tirado la puerta. Y me dijo que me iba a tener que ir del lugar. Cuando me fuí le dije que todo lo que había pasado ahí era culpa de ellos. Porque uno de los efectivos me dijo que habían tenido un montón de problemas en esa casa. Se la pasan gritándole cosas a las nenas cuando entran y cuando salen de la escuela. Y son todas menores de edad. Y esta vez se pasaron de la raya porque quisieron manotear a la nena. Por eso le dije eso. Si ellos hicieran bien su trabajo estos tipos no tendrían por que estar ahí todavía. Y todo esto se hubiera podido evitar. Y por todo eso yo casi me desgracio la vida”, concluyo.

Finalmente Alexis, padre de la víctima dijo que cuando llegó a su casa le llamó por teléfono su primo diciéndole que estaban en la Comisaria y que no había nadie que le tome la denuncia. Fue por eso que les dijo que no hicieran nada y que volvieran a la casa porque la policía no iba a hacer nada y los habían tratado muy mal.

También dijo que reconoce que estuvo mal y que iba a averiguar quien es el dueño de la casa para pagarle la puerta y hacerse cargo de los gastos. “La policía no nos protegió”, sentenció.

FUENTE: FM LA MEDIALUNA - JUSTINIANO POSSE