En medio de gritos, insultos, repiques de tambor y bocinazos, se desarrolló una sesión ordinaria de Concejo en el que solo se trataría el tema de la declaración de la emergencia económica del municipio por el término de un año.
El proyecto de ordenanza, de once páginas, fue leído por la secretaria Micaela Angulo y ni bien finalizó la lectura comenzaron los gritos e insultos hacia el Preseidente del Concejo Paulo Arce y hacia los concejales oficialistas.
Una de las voces más firmes luego de la lectira del proyecto fue la el Secretario General del gremio, Daniel Bustos, que se acercó al Presidente pidiéndole que no se tratara el proyecto porque el mismo " es llevar a la ruina a los trabajadores municiaples".
En medio del caos, el Presidente pidió un cuarto intermedio al que los concejales de la oposición no respondieron. Más allá de eso, el oficialismo se retiró del recinto para volver -solo el Presidente del Concejo- casi dos horas después.
Estaba prevista la presencia y explicación de cada punto del proyecto de la Contadora Vanesa Pascual, Secretaria de Hacienda y Finanzas, aunque el clima de caos, no permitió que la funcionaria ingrese al recinto. Se solicitó presencia policial y todo comenzó a controlarse de a poco aunque el malestar quedó dando vueltas en el ambiente. 
Durante ese cuarto intermedio se sucedieron reuniones del oficialismo con la oposición y con los miembros del sindicato pero finalmente no hubo acuerdo.
El Presidente del Concejo retornó al recinto a las 23:30 hs. y dijo que la sesión se daba por concluida. En ese momento hubo aplausos de parte de los trabajadores ya que el objetivo era que el proyecto no se votara.
Los integrantes del sindicato le solicitaron al Presidente del concejo que sea nexo entre ellos y el ejecutivo municipal para poder reunirse, conformar una comisión y solucionar un tema que, a todas luces, se lo ve muy complejo.
En declaraciones a MIRA FM 106.3 el Secretari General del Sindicato, Daniel Bustos, directamente pidió la renuncia del Intendente Luis Trotte.