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Monte Maíz

INTERÉS GENERAL

25 de julio de 2025

COMUNICADO MUNICIPAL SOBRE EL PARO DE LOS EMPLEADOS

"LOS DELEGADOS MUNICIPALES DE MONTE MAÍZ ¿DERECHOS DE TODOS O PRIVILEGIOS DE POCOS?

La Municipalidad de Monte Maíz, a través de este comunicado, quiere aclarar los hechos de público conocimiento.

Frente al conflicto, es necesario contar la verdad con datos concretos para aclarar la situación actual ya que toda la comunidad merece transparencia y respeto.

 

1. Salarios indignos y recortes

Los salarios municipales no son de indigencia. Históricamente el Municipio ha otorgado paritarias que colocan los sueldos públicos locales por encima de buena parte del sector privado en nuestra región. Aun en este contexto de emergencia, los haberes siguen siendo dignos y se abonan en tiempo y forma.

En junio la reducción salarial fue por la disminución de la jornada a seis horas y la suspensión transitoria de ciertos suplementos, que solo algunos trabajadores tenían. Pero los sueldos están lejos de ser bajos o ilegítimos.

 

2. Traslados del personal

Los denominados “traslados” consisten en reubicaciones de personal en otras áreas donde el servicio lo requiere.

Estas reasignaciones respetan la idoneidad del agente y sus antecedentes laborales. Además de la situación de revista que tienen.

La distribución del personal debe responder a las necesidades de la comunidad, no a la comodidad individual.

El sindicato no impugnó globalmente estas medidas. En la audiencia del 7 de julio ante el Ministerio de Trabajo, se comprometió a presentar casos puntuales para revisión. Si existieran perjuicios concretos, debieron haber sido planteados con fundamentos, y no mediante afirmaciones genéricas que confunden a la ciudadanía.

 

3. Jornada laboral

La reducción horaria no fue objetada por el Sindicato en la audiencia que se celebró en el Ministerio de Trabajo, el 7 de julio. Allí ambas partes —Municipio y sindicato— expusieron su posición y firmaron un acta que consta en el expediente.

Resulta contradictorio que hoy convoquen a paro por una medida que fue aceptada y recomendada por el Sindicato ante el Ministerio.

 

4. El taller municipal: cuando la trayectoria no garantiza resultados

Se afirma que el taller mecánico municipal tenía una “trayectoria de más de 20 años” y que fue cerrado en perjuicio del parque automotor. Sin embargo, lo que no se dice es que ese mismo taller, durante todo ese tiempo, funcionó sin rendición de cuentas, sin registros verificables de reparaciones, y bajo el control absoluto de un grupo que manejaba repuestos, herramientas, combustible y decisiones, sin supervisión externa.

Durante esta gestión, el Municipio incorporó una flota moderna: tres tractores nuevos, un camión regador, camiones Foton, motoguadañas y herramientas. Y sin embargo, esas mismas máquinas comenzaron a deteriorarse o quedaron “fuera de servicio” sin justificación clara, mientras el taller reportaba fallas constantes.

Cuando se ordenó el cierre preventivo y se encargaron auditorías externas a mecánicos particulares, se comprobó que varios vehículos no presentaban ninguna falla real. Un tractor nuevo, detenido durante semanas, volvió a funcionar sin que se le hiciera reparación alguna. Las mismas palas y camiones supuestamente “parados” por falta de repuestos, funcionaron con normalidad al ser reubicados.

 

5. Sumarios administrativos y supuestas amenazas

Es falso que la Municipalidad amenace a los trabajadores. La apertura de sumarios administrativos no tiene relación con la emergencia ni responde a persecuciones. Se trata de un instrumento legal previsto por el Estatuto del Empleado Público Municipal, aplicable ante hechos concretos. Por ejemplo, ante perjuicios causados al servicio, a terceros o a la administración, irregularidades en el cumplimiento de funciones, faltas de disciplina graves, etc. Esto se hace cuando surgen hechos de este tipo.

Sería inadmisible que una administración pública no investigue este tipo de situaciones.

 

6. Refrigerio digno no es sinónimo de improductividad

El nuevo sistema de refrigerio adoptado por la Municipalidad alcanza únicamente al personal de maestranza y técnico, es decir, a quienes desarrollan tareas operativas en la vía pública. No afecta en absoluto al personal administrativo, de salud ni a quienes cumplen funciones asistenciales, que continúan teniendo plena libertad para tomar el refrigerio o hacer pausas breves durante su jornada laboral.

Hasta pocos días, las cuadrillas regresaban al corralón todos los días alrededor de las 9:30 para tomar el refrigerio por cuenta propia en la matera. Permanecían allí hasta las 10:30 o más, y luego retomaban tareas solo por un corto período antes de volver nuevamente a guardar herramientas. Esta modalidad implicaba, en promedio, una pérdida de más de una hora diaria de trabajo efectivo, en una jornada laboral de seis horas.

A partir del 22 de julio, y mediante resolución formal en el marco de la emergencia, la Municipalidad reorganizó el refrigerio, que ahora es provisto por el propio municipio: mate cocido caliente y bizcochos distribuidos en el lugar de trabajo, sin necesidad de que las cuadrillas abandonen su zona de tareas. El descanso sigue garantizado, en condiciones adecuadas y respetuosas.

El sindicato calificó esta modalidad como “inhumana”. Pero inhumano no es recibir el refrigerio caliente en la zona de trabajo. Inhumano sería interrumpir el servicio público todos los días, mientras la comunidad espera que las calles estén limpias y el pueblo funcione.

Por último, nadie restringe necesidades básicas: cada empleado puede ir al baño cuando lo necesita, como ocurre en cualquier ámbito laboral digno. Lo que se ordenó es el tiempo del refrigerio improductivo. Porque gestionar también es cuidar el tiempo de trabajo.

 

7. Supuestos aumentos del 20% a “alineados”

En el marco de la emergencia no se otorgaron aumentos discrecionales del 20% a ningún agente. Si no que corresponden a funciones cumplimentadas y adicionales que siguen vigentes.

Se publicaron recibos de sueldo de un agente municipal correspondientes a meses anteriores a la emergencia, sin aclarar que actualmente percibe alrededor de $400.000 menos debido a la reducción horaria, la suspensión de responsabilidad y disponibilidad.

Lamentablemente, se utilizó el caso para atacar a un funcionario por razones políticas, afectando injustamente a su hijo, que no tiene ninguna mejora ni beneficio especial.

Atacar a quienes mantienen funciones por decisión del Ejecutivo implica, en los hechos, que el sindicato está en contra de los trabajadores que no responden a su línea.

 

8. Recategorizaciones por mérito y antigüedad

El Municipio busca ordenar, premiar el mérito y corregir inequidades. Las recategorizaciones se aplicaron exclusivamente en base a criterios objetivos: la función efectivamente desempeñada (como jefes de cuadrilla o encargados operativos) y la antigüedad acumulada conforme a ordenanza.

El Sindicato ataca a quienes fueron recategorizados con sustento legal, aun cuando muchos de ellos también son afiliados.

 

9. Sobre el verdadero alcance del esfuerzo colectivo

Frente a la situación crítica que atravesamos, el esfuerzo exigido a los trabajadores municipales es equitativo y generalizado. No hay privilegios ni excepciones. Lamentablemente, el sindicato intenta instalar lo contrario, intentando tergiversar los hechos y sembrar división.

El Intendente no percibe salario municipal alguno: cobra su jubilación. Y todo el equipo de gobierno, planta política y personal de gabinete —integrado por muy pocos funcionarios— percibe una reducción del 30% de su sueldo.

A pesar de ello, trabaja cada vez más para sostener el funcionamiento del Estado local en un contexto de emergencia financiera, institucional y operativa.

 

10. Sobre la contratación de servicios externos de limpieza
La Municipalidad se vio obligada a contratar de manera excepcional una empresa para tareas urgentes de limpieza urbana, debido al grave estado de abandono y acumulación de residuos en distintos sectores del pueblo. Esta decisión no constituye una política de reemplazo del personal municipal, sino el ejercicio del deber del Intendente de garantizar la prestación de servicios públicos esenciales y resguardar la salud y seguridad de los vecinos.

Durante ese período, el nivel de ausentismo en las cuadrillas fue inusualmente elevado. Se registraron múltiples licencias por ART, certificados médicos, permisos gremiales y vacaciones, en coincidencia con reiterados informes sobre maquinarias supuestamente fuera de servicio. A su vez, el gremio presionaba activamente para que los trabajadores no salieran a cumplir sus tareas, en lugar de fomentar el cumplimiento de los deberes laborales hacia la comunidad.

Los servicios públicos existen para toda la comunidad. No es aceptable condicionar su funcionamiento a intereses sectoriales o especulaciones internas. La Municipalidad actuó conforme a derecho y a su deber político y legal de asegurar la limpieza, el orden y el funcionamiento de los servicios básicos, más aún en un contexto de emergencia.

 

11. La proveeduría sindical

Durante años, el sindicato solicitó a la Municipalidad que realice descuentos directos sobre los haberes de empleados municipales para cubrir compras realizadas por sus afiliados en la denominada “proveeduría sindical”, un servicio que ellos mismos ofrecen como parte de su estructura gremial. Sin embargo, jamás existió un convenio formal entre el gremio y la Municipalidad que regulara este mecanismo.

Frente a esta situación, la Municipalidad decidió dejar de actuar como intermediaria de èste sistema sin respaldo normativo. La proveeduría sigue existiendo, pero ahora es el sindicato quien debe gestionar el cobro directamente, establecer sus condiciones y responder ante sus afiliados por lo que ofrece. No se ha prohibido ningún servicio.

 

12. Sobre el paro sindical y el rol del Ministerio

El sindicato fundamenta su medida de fuerza en una supuesta falta de respuesta del abogado patrocinante del Municipio, pero omite decir que el 7 de julio mantuvimos una audiencia en el Ministerio de Trabajo, en la cual las partes dialogaron, intercambiaron posiciones y firmaron un acta que estableció reuniones mensuales, con la próxima programada para el 7 de agosto.

En esa misma audiencia, los representantes sindicales manifestaron expresamente que siempre han tenido buen diálogo con la Municipalidad. ¿Entonces, por qué convocan al paro? ¿Qué justifica una medida de fuerza cuando se está en instancia de diálogo y con mecanismos vigentes de revisión?

Es momento de aclarar a la comunidad cuales fueron los mecanismos del sindicato hasta la actualidad. Durante años gozaron de un poder de decisión interna desproporcionado dentro del Municipio, no en representación sindical legítima, sino para influir sobre la gestión del personal y de los servicios a su antojo. Ese modelo se terminó.

 

13. ¿A quién representa realmente el sindicato?

Es momento de preguntarse con claridad: ¿Qué intereses defiende el sindicato?¿La defensa colectiva del trabajo municipal o los privilegios de unos pocos?

En lugar de defender derechos laborales genuinos, atacan a trabajadores que cumplen funciones, rechazan recategorizaciones legítimas, niegan tareas nuevas a quienes pueden hacerlas, impiden la rotación de personal y presionan a sus afiliados para que no trabajen. Todo mientras su principal referente goza de licencia sindical desde el año 2015, percibiendo su salario sin cumplir jornada laboral en el Municipio.

El Intendente y el equipo de gobierno honran los derechos laborales y reconocen el valor de cada agente municipal.

El Intendente asume su responsabilidad con la comunidad, con la gestión para la que fue elegido democráticamente, y con el deber de sostener el funcionamiento del Estado.

Este conflicto persigue conservar privilegios que no representan a todos los trabajadores, ni responden al interés de la comunidad. No es salarial.

El sindicato no acompaña medidas necesarias tomadas. Ni respeta los acuerdos consensuados ante el Ministerio de Trabajo.

Mientras tanto la Municipalidad intenta garantizar servicios básicos de limpieza y salud. Acepta el diálogo por canales acordados. Y trabaja cada día con menos recursos y asumiendo la responsabilidad requerida.

Este gobierno no va a retroceder.

Se gobierna para la comunidad, no para un grupo.

Monte Maíz merece claridad, esfuerzo compartido y servicios que funcionen. Vamos a seguir trabajando para eso.

 



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