En los últimos meses se conocieron casos de pacientes que debieron cambiar de médico o especialistas porque las Mutuales, Obras Sociales o Prepagas decidieron cancelar convenios con determinados prestadores. Los principales perjudicados son los pacientes que sufren lo que se conoce como el “Desamparo Médico” por el cambio de Profesional que deben hacer para que las Mutuales le cubran la atención médica y los tratamientos. Acerca de ello en el Programa Radial “Nada del Otro Mundo” de Radio Universidad de Córdoba dialogaron con el Dr. Carlos Pressman, especialista en el tema: “En primer lugar se debe diferenciar entre el Ente Financiador por un lado y el roll de la Historia Clínica en la relación médico Paciente. En el primer caso, estamos hablando de quien paga el acto médico; puede ser pagado de manera privada, por una Obra Social o por una Institución Prepaga. El mercado de la financiación de la enfermedad es muy complejo y en la Argentina funciona de manera única y distintiva, ya que en otros países se manejan de otra manera. En Argentina es en el único país en donde conviven tres sistemas financiadores: el modo privado, el modo de las obras sociales y el modo de las prepagas que han tenido determinada preponderancia a la hora de financiar dependiendo del período político por el que se atraviese. Y como todo ente financiador, está atravesado por las políticas económicas globales. Cuando se produce un aumento exorbitante de los costos de la asistencia médica, los entes financiadores toman distintas medidas para sobrevivir y ganar dinero. Es ahí cuando empiezan a excluir a los sectores de personas más grandes porque les resulta muy costoso o aumenta deliberadamente las cuotas de sus afiliados. Pero esto no tiene nada que ver con el acto médico propiamente dicho; en él, la historia clínica se constituye en un documento que registra de manera secreta e íntima los aspectos biológicos, biográficos y sociales del paciente. Esto la constituye en un vínculo fundamental entre médico y paciente. Por eso cuando se lo deriva por cuestiones de cobertura, se siente ese desamparo médico que sería importante evitar. La historia clínica es un documento que el paciente puede solicitar en cualquier establecimiento de salud en el cual es tratado; tiene derecho a solicitar una copia y la Institución está obligada a brindársela”, subrayó. Luego se refirió al sistema de salud en Argentina que está relacionado directamente con el dinero: “El sistema sanitario general en nuestro país se funda en la enfermedad; a diferencia del sistema inglés que se funda en la salud. Y dentro de esta lógica, el médico gana más dinero cuanto más enfermo esté el paciente. Tomo Inglaterra porque vendría a ser como la Capital del Capitalismo; pero allí, tienen el Instituto Nacional de excelencia Clínica y su sistema de salud se basa en el sistema público de salud. Cada médico tiene asignado un número “x” de personas; si esas personas se enferman el médico cobra menos. O sea la rentabilidad del profesional se basa en la salud y no en la enfermedad. Por ejemplo, a los cirujanos se le controla la cantidad de cirugías que practica y los resultados de las mismas y así hacen un ranking. De esta manera, aquellos que tienen menos complicaciones y menos porcentaje de mortalidad son los cirujanos a los que se les derivan mayor número de pacientes. Mientras tanto, en la Argentina pasa lo contrario. A mayor grado de enfermedad del paciente, mayor es la rentabilidad para el profesional. Hoy se vive una tragedia sanitaria en nuestro país. Porque en el sector médico conviven tres subsectores de la atención: el sector público, como hospitales y/o dispensarios; muy poquitos hospitales de obras sociales y los hospitales de índole privado.  Es por eso que en la provincia de Córdoba y en otros tantos lugares se ha restringido tanto los lugares de atención médica. Simplemente porque resulta más rentable cualquier emprendimiento inmobiliario que invertir en una clínica por ejemplo. Es por eso que muchos Profesionales de la salud preferían vender los lugares de atención por el valor del lote en donde se construyeron edificios de departamentos porque les resultaba más rentable que atender pacientes con los riesgos que ello implica. En las políticas liberales, que siguen la orientación de  Estados Unidos y no las de Inglaterra, las políticas de salud tienen que ser rentables. Entonces, para que haya más centros de salud privados que atiendan a la gente por mutuales y obras sociales tiene que haber, paralelamente, un buen sistema público de salud que absorba y atienda a todos aquellos pacientes que no puedan pagar una mutual o la atención privada. El sector de asistencia pública nunca es rentable porque siempre está gastando en atender a pacientes; con este concepto de gastos y no de inversión que se traduce en asistir a pacientes. En estos últimos dos años el sector público de atención médica se ha retirado de una manera dramática, brutal y trágica y que se va a ver reflejado en innumerables indicadores sanitarios traducidos en mayor porcentaje de mortalidad infantil, desnutrición, reducción de la expectativa de vida y mayores niveles de internación. Esto ocurre y seguirá ocurriendo porque un sector importante de la población no puede acceder al Hospital; a su vez, el Hospital no cuenta con recursos humanos para la atención correcta; personal que se jubila no se repone; el Hospital no cuenta con muchos especialistas con lo cual te dan turnos a seis meses. O sea se está viviendo una situación dramática en la salud para quienes trabajan en el sector público ya sea Provincial, Municipal o Nacional porque las políticas públicas están orientadas a que el Estado se retire de la salud y que se retiren todos los programas sociales destinados a ayudar a los sectores de menores recursos. Así, se recortan los servicios en el PAMI, se recortan las prestaciones de medicamentos, se recorta el Programa REMEDIAR, el Programa Médicos Comunitarios y el Programa de Vacunación completa. Cuando el Gobierno aplica medidas para que el Estado se retire, a menor Estado, mayor enfermedad. El Ministro de Salud de la Nación tiene menos injerencia de lo que todos nos imaginamos con respecto a la aplicación de políticas públicas en materia de salud. Y esto se debe a que cada Provincia y Municipio tiene su propia dependencia y su propio Funcionario en la salud. Pero el Estado debería garantizar un sector Público fuerte ordenando los recursos económicos destinados a la salud. Pero esto nunca se pudo hacer. Y en esto entran razones políticas, sociales y sanitarias de una magnitud mayúscula. Hoy volvemos a ver niños desnutridos por la caída del consumo de leche; adultos en la misma condición por el bajo consumos de carnes; enfermedades respiratorias agudas por ausencia de vacunas y aparición de enfermedades que creíamos erradicadas”, concluyó.

FUENTE: Radio Universidad - PROGRAMA: Qué Pretende usted de Mí? del 13 de Julio de 2017. En el Audio adjunto se puede escuchar el programa completo. La Nota con el Dr. Carlos Presman comienza a los 140 minutos de dicho audio.