INTERÉS GENERAL
11 de septiembre de 2022
EL EXCESO EN LAS PANTALLAS AFECTA EL DESCANSO
CONCLUSIÓN INESPERADA EN UN TRABAJO PARA LA FERIA DE CIENCIAS EN UN COLEGIO DE RÍO CUARTO
Importante conclusión surgió de un proyecto de trabajo del quinto Grado de una escuela de Rio Cuarto, Centro Educativo Manuel Belgrano. Docentes y alumnos habían propuesto trabajar con el sistema circulatorio y para ello debían abordar alguna problemática.
Esto se enmarca dentro de la Feria de Ciencias. Y comenzaron a notar que nadie quería sentar cerca del calefactor porque los alumnos decían que les hacía mal. Presentaban síntomas tales como sueño, dolor de cabeza, dolor de estómago y náuseas. Es por eso que los docentes trataban de reubicar a los alumnos para que todos estén cómodos. Y en esta problemática surgió el proyecto que fue denominado “Nada es lo que parece”.
Al respecto Claudia Driusan, docente de Grado indicó: “A partir de estos síntomas los alumnos comenzaron a plantear hipótesis. Uno de los cursos indicó que el calefactor está muy cerca de la ventana y el tubo de salida también. Y eso hace que, al tener ventilación cruzada, el monóxido ingresaría al aula causando esos síntomas. En el otro grado la hipótesis fue que la temperatura del calefactor era muy elevada. Con lo cual, cuando salían al recreo, donde estaba frío, les hacía mal el cambio de temperatura. A partir de esto se comenzó con el trabajo de investigación. En el estudio del aire y del monóxido de carbono se presentaron muchas dudas por lo que se decidió llamar a profesionales para que pudieran zanjar esas dudas. En primer lugar tuvimos la visita de un capacitador en Primeros Auxilios y además es paramédico. El disertó sobre el tema y capacitó a los alumnos en prevención y primeros auxilios. Y dio algunas recomendaciones a tener en cuenta en caso de que el problema del malestar de los alumnos fuera el calefactor. Luego vino un gasista matriculado y el desarmó un calefactor y explicó cual era el funcionamiento del mismo. Por último nos visitó una pediatra. Luego de estas charlas se comprobó que el monóxido ingresaba por las ventanas pero no era puro; sino combinado con el aire y por lo tanto no le podía hacer mal a los alumnos. Y también podría ser que el cambio de temperatura los afectara tal como fue planteado en la segunda hipótesis. Pero con la Doctora, que empezó a indagar un poquito más, se llegó a la conclusión de que los síntomas que ellos tenían era por la falta de descanso. En uno de los cursos, de 29 alumnos, 21 manifestaron que se acostaban muy tarde. Y eso es lo que los estaba afectando. La doctora nos dijo que es un tema recurrente en su consultorio ya que los niños están muy pendientes de las pantallas; tablets o teléfono celular. Fue realmente una conclusión inesperada a la que se llegó a través de este trabajo”.
Está científicamente comprobado que los niños deben descansar entre 8 y 11 horas y que de la una de la mañana hasta las cuatro de la madrugada el organismo renueva las hormonas. Estas son las responsables de la carga de energía para hacer frente al nuevo día. Y si eso no pasa pueden aparecer estos síntomas que pueden confundirse con una gripe o con la intoxicación producida por el monóxido d carbono o por la ingesta de un alimento.
La docente que también estuvo a cargo del proyecto y quien participó de la charla con nuestro Medio, es Flavia Vlches. Y la Directora del establecimiento es Mirian Acosta.