ESPECTÀCULOS
11 de febrero de 2025
EL PAYASO PURURÚ ES NOTICIA EN EL DIARIO DE VILLA MARÍA

POR SUS ESPECTÁCULOS INFANTILES
Hacer reír a la gente, y especialmente a niñas y niños, es la principal tarea del payaso, palabra que viene del italiano “pagliaccio”, y que tiene múltiples antecedentes en culturas y civilizaciones antiguas, como los bufones de la Edad Media, e incluso en el antiguo Egipto, porque también los faraones necesitaban que alguien los haga reír, desestresándolos, cumpliendo un papel hasta político.
Así, la imagen del payaso actual se remonta a 1768, cuando el inglés Philip Astley incluyó un acto de payasos en el primer circo de la historia. Hoy en día, el payaso ya es parte de toda nuestra cultura Y payaso Pururú, personaje nacido en Villa María, pero que, de alguna manera, viene de Monte Maíz (de donde es el “clown”, de ahí lo de “Pururú”) desde hace 20 años continúa con la tradición payasesca, entre chistes y chistes, como cuenta Marcos Juárez (40), su orgulloso creador: “Yo estudié en el Profesorado de Educación Física en Las Rosarinas. Cuando tenía 20, un día la mamá de un primito me preguntó si no quería animarle la fiesta de cumple. Dije que sí, me disfracé con ropa que mi abuelo me prestó, una camisa grande, un jean y los tiradores con corbata de un personaje que lo usaba así, me puse una nariz y me maquillé con los pomitos de torta que se usaban. Así hice mi primer cumple y me encantó”.
Así nace el payaso Pururú. Al principio, contó, hacía juegos solamente, “pero después empezó a gustar lo que hacía, a chicos, grandes y a mí, y comenzaron a llamarme, por lo que comencé a idear mi propio espectáculo callejero y a buscar información sobre temas de payasos, de manera que fui armando al personaje. Luego fui a mi primer encuentro de circo, que me encantó, y ahí dije ‘quiero ser payaso’ sí o sí, y empecé este camino, que ya lleva 20 años”.
Un destino de risas
Es así como Marcos Juárez encontró lo que de verdad quería hacer en su vida. Un día vio a un payaso y pensó que quería ser como él. Así fue que, tomándolo como referente, le dio forma a lo que hoy es el payaso Pururú.
“Ser profesor de Educación Física fue muy importante para ser payaso, por la parte física, el tema de los juegos y demás. Finalmente, armé mi propio show callejero, que comencé a realizar en Villa María, a la gorra. Luego, me vi haciendo lo mismo en Carlos Paz, cosa que hice durante 10 años. También estuve tres años en Miramar de Ansenuza (Mar Chiquita) y realizando eventos donde me llama la gente”, expresó.
Detalló que su característico traje y disfraz actual fue evolucionando con el tiempo, hasta llegar a la versión que tiene hoy.
“Siempre tuve los mismos colores, hasta llegar a esta versión actual, ya con un vestuario específico, aunque va variando siempre un poquito”, contó.
Sobre qué le produce hacer reír a los niños, señaló: “Tanto a los niños como con los grandes, es maravilloso hacerlos reír. Obviamente, con los niños mucho más. Ya cuando ves en sus ojitos cómo empiezan a brillar, donde se ve esa ilusión que les produce el payaso, lo que hace, es como si te vieran como un referente, y eso emociona. En los papás y mamás veo que es como que ven su pasado, y al niño o niña que alguna vez fueron, como si lo fueran de nuevo. Es maravilloso ver cómo uno genera ese asombro, flasheando con el personaje y el show. El niño te brinda magia, es como un ida y vuelta, que a mí me alimenta el alma y el corazón”, detalló.
FUENTE: www.eldiariocba.com.ar